Ho sognato che stavi a ginocchi
Come un santo che prega il Signor
Mi guardavi nel fondo degli occhi
Sfavillava il tuo sguardo d'amor.
Tu parlavi e la voce sommessa
Mi chiedea dolcemente mercè
Solo un guardo, che fosse promessa
Imploravi, curvato al mio piè.
Io taceva e coll'anima forte
Il desio tentatore lottó
Ho provato il martirio e la morte
Pur mi vinsi e ti dissi di no.
Ma ilo tuo labbro sfiorò la mia faccia
E la forza del cor mi tradí
Chiusi gli occhi, ti stesi le braccia
Ma sognavo, e il bel sogno svaní.
Sueño
Soñé que estabas de rodillas
como un santo que reza al Señor
me mirabas y en lo profundo de tus ojos
resplandecía tu mirada de amor.
Tú hablabas y tu suave voz
dulcemente me suplicaba,
sólo una mirada que fuese promesa
implorabas, inclinado a mis pies.
Yo callaba, y con mi ánimo fuerte
el deseo tentador luchó,
sentí que sufría como un mártir, que moría,
y sin embargo me vencí a mi misma y te dije que no.
Pero tu labio rozó mi rostro,
y la fuerza del corazón me traicionó
cerré los ojos, te extendí mis brazos...
pero soñaba, y el hermoso sueño se desvaneció.
Un libro sobre Tosti, que habría que conseguir, aca:
F. Sanvitale: Il canto di una vita, Torino, 1996